PREPARADOS PARA EL

Escrito el 29/09/2024
PASTORES DEBORA Y MIGUEL VAZQUEZ


El que no trabaje que no coma, 

(2 Tesalonicenses 3:10) a nivel de chiste lo dije a mis hijos porque no se atrevían a pasar al frente en un aniversario...

    Pero luego yo pensaba que "tremendo trabajo"?... Pero en realidad si, es un tremendo trabajo, tan solo pararse para que te reconozcan como un hijo de Dios. 

Y donde estaría el trabajo?.

   Luego viene, ya llega....

   porque?...

   Nos mostramos públicamente y nos declaramos enemigos número uno al mismo diablo, y a sus huestes de maldad, y ahí está el trabajo, cual?....mantener la palabra de Dios en nosotros, con integridad, relación de pertenencia y permanencia. Ser diligente en los mandatos del Señor, para conseguir la meta que El quiere para nosotros.

    Entonces si era un trabajo!!! 

El concepto de entrega y de servirle a las manos del Señor.

Si estás trabajando para el Señor, es natural que te preguntes cómo el diablo puede oponerse a tus esfuerzos.

 * Tentación: El diablo buscará tentarte a apartarte de Dios a través de tus deseos, miedos o ambiciones. Puede presentarte oportunidades que parecen buenas, pero que en realidad te alejarían de tu propósito.

 * Duda: El enemigo tratará de sembrar dudas en tu mente sobre tu fe, tu llamado o la bondad de Dios. Puede hacerte cuestionar si estás haciendo lo correcto o si Dios realmente está contigo.

 * Fatiga y desánimo: A través de circunstancias difíciles o desafíos prolongados, el diablo puede intentar desanimarte y hacerte renunciar a tu servicio.

 * Distracciones: Puede presentarte muchas distracciones para que te enfoques en cosas menos importantes y descuides tu relación con Dios.

¿Cómo podemos resistir al diablo?

* La Palabra de Dios: La Biblia es nuestra espada espiritual. Estudiarla y meditar en ella nos fortalece y equipa para resistir las tentaciones.

 * La oración: La comunicación constante con Dios nos permite recibir su fuerza y guía.

 * La comunidad: Rodearte de otros creyentes te ayudará a mantenerte fuerte en tu fe y a recibir ánimo.

 * La armadura de Dios: Efesios 6:10-18 describe la armadura espiritual que Dios nos proporciona para resistir al diablo.

* Efesios 6:10-18: La armadura de Dios.

 * Santiago 4:7: Resistid al diablo, y huirá de vosotros.

 * 1 Pedro 5:8-9: Sed sobrios, velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe.

Acordate: No estás solo en esta lucha. Dios está contigo y te dará la fuerza que necesitas para vencer al enemigo.

¿Por qué el diablo no quiere que trabajemos para el Señor?

 * Oposición a Dios: El diablo, ser en oposición directa a Dios. Si nosotros, como seres humanos, elegimos seguir a Dios y servirle, esto va en contra de los deseos del diablo.

 * Deseo de la destrucción: El diablo es a menudo representado como un ser destructivo que busca llevar a la humanidad al pecado y la perdición. Al trabajar para el Señor, estamos trabajando para construir un mundo basado en el amor, la paz y la justicia, lo cual es lo opuesto a lo que el diablo desea.

 * Tentación y engaño: El diablo es maestro en la tentación y el engaño. Utiliza diversas tácticas para distraernos, desanimarnos y alejarnos de Dios. Al trabajar para el Señor, estamos resistiendo estas tentaciones y demostrando nuestra lealtad a Dios.

 * Lucha espiritual: La vida cristiana es una lucha espiritual constante contra las fuerzas del mal. El diablo busca derribar, debilitar nuestra fe y hacernos dudar de Dios. Al trabajar para el Señor, estamos participando en esta lucha y contribuyendo a la victoria final de Dios.

 

El diablo no quiere que trabajemos para el Señor porque esto representa una amenaza directa a su poder y a sus planes para la humanidad. Al elegir servir a Dios, estamos tomando una posición clara en esta gran batalla espiritual.

ROMANOS 8:31.

"Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?" es un versículo muy poderoso de la Biblia.

¿Qué significa?

 * Dios está de nuestro lado: Este versículo nos asegura que si hemos aceptado a Jesús como nuestro Salvador, Dios está siempre a nuestro favor.

 * Pueden estar en contra de nosotros, pero, Ninguna fuerza, persona o circunstancia puede vencer a alguien que tiene a Dios de su lado.

 * La seguridad en Dios Nos brinda una gran paz y seguridad saber que, pase lo que pase, Dios está con nosotros.